• El economista defiende que 'España es un país pobretón y Dinamarca, Noruega y compañía no lo son'
  • Cree que la presión fiscal en España es 'baja' comparada con otros países
Santiago Niño Becerra, nino becerra, becerra, economista

Santiago Niño Becerra ha dado su opinión sobre la situación de España, en concreto sobre la recaudación fiscal, y lo que ha dicho no es nada halagüeño. Y es que el economista considera que "España es un país pobre que recauda poco y que exprime fiscalmente a sus ciudadanos".

"El ciudadano medio no cesa de quejarse de que 'paga muchos impuestos' y de que su dinero 'cada vez le alcanza para menos'"

En su último artículo de La Carta de la Bolsa, Niño Becerra explica su punto de vista sobre este tema y asegura que los españoles tienen "la sensación de que se les está aplastado por impuestos depredadores". Se expresa en esos términos al haber sido preguntado por uno de sus lectores por la presión fiscal, que según el catedrático de Estructura Económica de la Universidad Ramon Llull es "baja en España en relación a otros países".

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Explica Niño Becerra que "presión fiscal es el porcentaje que los ingresos fiscales representan sobre el PIB", y en ese sentido la presión fiscal en España es baja en relación a otros países. Algo que, además, bajo su punto de vista, es "incuestionable" a pesar de que "el ciudadano medio no cesa de quejarse de que 'paga muchos impuestos' y de que su dinero 'cada vez le alcanza para menos'".

¿Qué está mal?, se pregunta el economista, y él mismo se responde. "Nada. Lo que sucede es que el de presión fiscal es un concepto macro y global y las manifestaciones del ciudadano medio son micro y local". Según dice Niño Becerra, "el PIB español está constituido por bajo y medio añadido, es decir, las bases imponibles -las rentas de todo tipo- a que eso da lugar son bajas; pero los entes fiscales tienen que recaudar, luego los tipos impositivos fijados son elevados, lo que, por quienes son poco colaborativos, es replicado con fraude fiscal, y por quienes pueden con instrumentos de reducción fiscal legales como las Sicavs".

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"España es un país pobretón y Dinamarca, Noruega y compañía no lo son"

Y el resultado de todo esto se puede resumir en la idea que defiende, la de que "España es un país pobre que recauda poco pero que exprime fiscalmente a sus ciudadanos". Además, asegura que "los países con mayor presión fiscal que España tienen mejores estándares de vida que España… porque producen bienes y servicios de mucho mayor valor, por lo que las rentas son mayores y aunque los tipos impositivos puedan ser menores -y como el fraude fiscal muchisísimo menor- la recaudación es más elevada y sus ciudadanías viven mejor".

"España es un país pobretón y Dinamarca, Noruega y compañía no lo son". Aunque eso, dice, "no quiere decir que en España haya superricos y en esos países pobres; aunque ser pobre en Noruega es menos malo que en España: ¡hasta en eso!".

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