- Las autoridades europeas están trabajando en fórmulas que permitan a Grecia mantenerse en el euro
- No obstante, también se preparan para una situación de emergencia en el caso de que fracase un acuerdo

La tensión aumenta, el clima que se respira en las negociaciones entre Europa, Grecia y los acreedores para conseguir que el país heleno no entre en default y se mantenga en la zona euro esta más enrarecido. Primero ha sido el primer ministro Alexis Tsipras el que ha salido a criticar el comportamiento de los acreedores tras no llegar a un acuerdo el pasado fin de semana, ahora son los aliados de Ángela Merkel, concretamente Andreas Scheuer, miembro del parlamento alemán y secretario general de la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), un partido que forma parte de la coalición que respalda a la canciller alemana, el que ha calificado duramente a los políticos griegos.