- Se reducirían los costes para paliar la delincuencia y el tráfico ilegal
- Sólo la ciudad de Amsterdam genera 400 millones de euros
Durante el último año se han incrementado los debates sobre la regularización de la marihuana. Los políticos ya lo han incluido en su debate y ya comienzan a realizarse las primeras estimaciones sobre su impacto económico. Su legislación, dentro de las fronteras del territorio español, unos 1.200 millones de euros en impuestos indirectos. ¿Aceptará el Gobierno su regularización?
Este proceso no es pionero en el mundo. Ciudades como Amsterdam o Eindhoven, estados como Ontario o Colorado ya han regularizado la venta de la marihuana. El consumo de cannabis se puede realizar en ciertos espacios habilitados, así como la venta, el cultivo y el transporte, que generan ingresos en los diferentes procesos de la cadena a través de los impuestos. Por ejemplo, en Amsterdam el 25% de la venta del polen de esta planta está destinada a gravámenes. El dinero recaudado se dedica exclusivamente a la educación.
Se calcula que hasta 19 millones de habitantes son fumadores habituales u ocasionales de marihuana
Un estudio realizado por el Ayuntamiento de Amsterdam hace dos años cifró en 400 millones de euros los impuestos indirectos al año. A eso hay que añadirle los impuestos especiales y la cifra se dispara: 1.400 millones de euros. “Es una realidad que hay que acudir a ella. Los impuestos, como los del alcohol o el tabaco, ayudarían a la economía española”, indica Bernardo Soriano portavoz de la plataforma ‘Regulación Responsable’ que reúne a cientos de asociaciones cannábicas, Clubes Sociales de Cannabis Empresas, y empresas del sector.
En Europa, según un estudio realizado por el Observatorio Europeo de la Droga y las Toxicomanías, se calcula que hasta 19 millones de habitantes son fumadores habituales u ocasionales de marihuana. En España, se estima que hay hasta tres millones y medio de consumidores.
Actualmente, debido a la legislación española -que partidos como Ciudadanos y Podemos quieren modificar-, el Estado no ve ni un solo céntimo del mercadeo existente. “La situación de alegalidad que se encuentran los denominados clubes sociales y el tráfico ilegal hace que Hacienda no pueda recolectar nada. Basta con regularizarla integralmente para conseguir una buena partida de impuestos”, argumenta Bernardo Soriano.
En España la legislación prohíbe el consumo y llevar consigo la marihuana en espacios públicos. Por tanto, el ciudadano se expone a sanciones económicas y, si superase los seis gramos, estaría considerado como delito contra la salud pública. No obstante, poseer una plantación para el consumo propio dentro de un domicilio siempre que no esté visible al público, no es sancionable.
1.200 MILLONES DE EUROS
Según las estimaciones de “Regulación Responsable” extrapolando datos de otros mercados regulados se calcula que hasta 1.200 millones de euros sólo en impuestos indirectos irían a parar a las arcas del Estado. “Colorado regularizó el consumo de cannabis en el 2014, saliendo del mercado negro. Este estado es ocho veces más pequeño que España, pero haciendo una similitud, hemos llegado a la conclusión que se generarían estos gravámenes”, aporta el portavoz.
La regularización del cannabis dejaría más de 1.000 millones de euros de facturación de las compañías
En estos cálculos no se inserta la cantidad que el Gobierno percibe por los impuestos especiales, como es el caso de la gasolina o del alcohol. Según la plataforma, “la recaudación se dispararía si se creasen los establecimientos de venta y consumo legal”. “Cada vez que se comprase una cantidad para el uso recreativo sea en forma de cigarrillo, de tartas, de bebidas y un largo etcétera, el Estado recogería el porcentaje destinado a impuesto especial”, sentencia.
El primer año, en el que sólo se regularizó el consumo de cannabis para el uso medicinal en Colorado, los ingresos por impuestos se elevaron a unos 140 millones de dólares.
UNA INDUSTRIA AL AUGE
Además de la recaudación por impuestos, Bernardo Soriano debate el empuje de la industria. “Los efectos producidos cambiarían el panorama español, ya que en esta industria cuentan con alrededor 5 ferias del sector, 1.200 Clubes Sociales de Cannabis, existen más de 1.500 tiendas de cultivo y múltiples negocios que facturan centenas de millones de euros. Calculamos que la regularización del cannabis esta cantidad aumentaría a miles de millones de euros la facturación de las compañías relacionadas con el sector, algo que a su vez también generará más impuestos directos”, recalca.
¿Y el turismo? Desde Regulación Responsable piden una regulación tanto para uso medicinal como para el recreativo y poder sentar así unas bases sólidas. “Se ha demostrado en otros países que no daña la imagen. En España se niega la consolidación del cannabis mientras se fomenta el turismo etílico dejando una imagen pobre en Mallorca”, recuerda Bernardo Soriano.
Por último, como argumentos positivos para la economía, el portavoz de Regulación Responsable añade que “se evitaría un gran gasto contra la delincuencia debido a que con él se limitaría mucho el mercado negro, las redadas, juicios a pequeños traficantes…”. De hecho, un reciente estudio del FBI en 2013 explicaba que la tasa de criminalidad fue un 10% menor en los primeros meses. “La policía arrestaba a 10.000 fumadores de marihuana al año antes de la legalización en Colorado. Hoy esos criminales son clientes de negocios legítimos”, recoge el dossier.