- El resultado de las elecciones este domingo servirá de termómetro para medir la temperatura del euroescepticismo
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No existe mejor termómetro que el euro cuando se trata de medir el pulso a los acontecimientos políticos y económicos que rodean a la zona euro. Las divisas son subyacentes, extremadamente sensibles, a todo lo que acontece sobre las distintas decisiones político económicas de una país
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Esta semana hemos tenido un claro reflejo de ello en la libra esterlina, tras conocerse la celebración de elecciones en Reino Unido el 8 de junio. Desde ese momento la libra se ha apreciado con fuerza contra los principales cruces (o majors). ¿Qué sucederá este lunes tras conocerse el resultado de la primera vuelta de las elecciones de nuestro país vecino? Según las últimas encuestas, la victoria de Emmanuel Macron en Francia se da por hecha, también en la primera vuelta. Se espera que el candidato de centro gane en la carrera al Elíseo, con aproximadamente un 60% de los apoyos el próximo 7 de mayo. Y se espera también que se imponga este domingo a Marine Le Pen con alrededor de un 25% del respaldo de los votantes.
A continuación analizamos técnicamente la actual situación del euro frente al dólar, libra y yen:
Desde mínimos anuales tenemos al cruce construyendo mínimos y máximos crecientes (tendencia alcista) dentro de una tendencia bajista de orden mayor. Pero como siempre sabemos cómo empiezan las cosas pero no cómo terminan nos fijaremos sólo en el precio y nada más que el precio. Y lo cierto es que desde que comenzó 2017 el euro/dólar es alcista contra el dólar. En el muy corto plazo nos debemos fijar en el soporte de los 1,05680 (mínimos de la semana pasada) y en la medida en que no se perforen la posibilidad de que continúe escalando posiciones con un primer objetivo en la resistencia de los 1,09 y por encima los 1,1030 (directriz bajista) es un hecho.
Esta semana hemos asistido a una fuerte apreciación de la libra británica frente al euro tras conocerse la celebración de elecciones en Reino Unido el 8 de junio. Esto ha llevado al cruce a poner a prueba el soporte que presentaba en los mínimos de diciembre (0,83027) y ahí (por el momento) se ha frenado. La perforación de este soporte podría acelerar la debilidad de la 'moneda única' frente a la libra con objetivo de caída hacia el soporte de los 0,81-0,8120 libras/euro. Como zona de resistencia, aunque lejana, tenemos la parte superior del movimiento lateral-bajista de los últimos meses, ahora en los 0,8740.
En las últimas semanas, el yen japonés ha actuado como subyacente refugio antes los principales cruces como consecuencias de las tensiones geopolíticas a nivel mundial. En este momento, en el muy corto plazo, cotiza en zona de resistencia (antes soporte). Conviene prestar atención a los mínimos de este lunes, donde comenzó el actual rebote (114,824 yenes/euros). De hecho se puede decir que el cruce ha encontrado soporte en la recta directriz que une los sucesivos mínimos crecientes desde el pasado mes de julio. La perforación de este soporte le puede llevar al origen del movimiento, esto es los mínimos de 2016 en los 109,485 (mínimos del Brexit).