MADRID, 07 FEB. (Bolsamania.com/BMS) .- Hoy Luis de Guindos es conocido por ser director del Centro del Sector Financiero de PriceWaterHouseCooper e IE Business School, pero entre 1996 y 2004 fue Secretario de Estado de Economía durante las dos legislaturas del Gobierno del Partido Popular. Este economista del Estado, que hoy ha ofrecido una conferencia sobre las "Perspectivas de la Economía Española" en el marco de una jornada titulada "La banca en el año post-reestructuración" organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), reconoce que en 2003, cuando ocupaba ese cargo público, “ya era consciente de que podía haber problemas importantes”. No obstante, De Guindos sitúa en 2005, 2006 y 2007 los años “más calientes” en cuanto a desequilibrios: “El diagnóstico es que España ha sufrido una burbuja del crédito, una burbuja inmobiliaria, tipos de interés muy bajos, política fiscal expansiva y pérdida de competitividad”.

Luis de Guindos concluye, sin embargo, que estos desequilibrios “importantes”, no son equiparables a los de Grecia, Irlanda o Portugal: “A diferencia de ellos, tenemos la posibilidad de, implantando las reformas, no necesitar ayuda exterior. El camino es estrecho, por lo que cualquier error en política económica lo pagaríamos”; pero inmediatamente después ha asegurado que, desde mayo, “el Gobierno hace cosas en la dirección correcta”. A pesar de estas buenas palabras, de Guindos ha definido la reforma laboral como insuficiente, y de la de las pensiones ha dicho que era tan necesaria ahora como hace tres años, “y como lo sería dentro de tres”.

En cuanto a la reforma del sistema financiero, cuyo decreto se conocerá este mes, probablemente en el Consejo de Ministros de esta semana o la que viene, se muestra tranquilo aunque tajante: “Aunque nos pusiésemos en el peor de los casos, con necesidades de capital en el sistema financiero español de hasta 120.000 millones de euros, que es la cifra más alta que se ha dado, el endeudamiento sobre PIB se quedaría, aun así, por debajo de la media de la Unión Europea”. Para el ex secretario de Estado de Economía, la clave está en que el proceso se haga bien, y ha hablado incluso de evitar malvender activos de las cajas. De Guindos apuesta por no discriminar, en clara alusión a que las exigencias de capital sean distintas para bancos y cajas, “porque ya de por sí las cajas tienen cierto estigma en el exterior, y es difícil que entre capital”. De hecho, él vaticina privatizaciones.

Para concluir, este economista ha advertido de que “el tiempo ya no arregla las cosas: Si España no se pone a crecer el próximo año, no habrá margen de error (…) El ajuste presupuestario sería tan grave que no lo conseguiríamos”.

M.G.
contador